La casa de mi infancia surge a partir de la respuesta a una consigna: dibuja la casa de tu infancia, que entregué a artistas, familia y amigxs.  Transferí  los dibujos y algunos textos recogidos de la experiencia de dibujar de memoria a las paredes de la sala, con papel carbónico o dibujando directamente por proyección, para respetar el dibujo original en cada caso.

Recibí alrededor de 40 dibujos con los que creé un paisaje de casas de la infancia con distintos materiales como lápices, grafitto, papel carbónico. Luego de la inauguración el muro siguió siendo intervenido por el público que dibujaba su casa de memoria y la integraba al horizonte de hogares.